Michel Sauval - Psicoanalista Jacques Lacan, Seminario "La angustia", Lectura y comentarios de Michel Sauval

Notas y comentarios
Sesión del 30 de enero de 1963

Duelo, transferencia y contratransferencia

1 - Retorno de la contratransferencia

La tercera parte de esta sesión comienza con una referencia a Margaret Little y su articulo "La respuesta total del analista a las necesidades de su paciente" (1). Ya había anticipado su abordaje, unas páginas antes, con el objetivo de analizar "el problema de dónde se sitúa la privación" (2). Pero las primeras páginas de esta parte de la sesión no abordan ese texto sino el que resulta designado del siguiente modo: "cierto discurso angustiado en ella, y de sus tentativas de dominar esa angustia hablando de contratransferencia"(3), y sobre el que dice haberse detenido "en cierto momento de mi seminario". Se refiere al artículo titulado "Contratransferencia y respuesta del paciente" (4), publicado en 1951, que Lacan comentó en la sesión del 27 de enero de 1954 (5), pero confundiéndolo, en esa ocasión, con el que Annie Reich había publicado, también sobre el tema de la contratransferencia (6), en ese mismo número del IJPA (de hecho, ambas autoras figuraban una continuación de la otra en el sumario)

En efecto, el material clínico que Lacan aborda en las páginas 154/5 (de esta sesión) refiere al paciente que descubre, recién dos años después, que la interpretación de su analista respecto del episodio en que había llegado a su sesión en un "estado de estupor rayano con la confusión" (7), luego de una conferencia por radio, no había tenido en cuenta el duelo por su madre, que es el material con el que se abre el articulo de Margaret Little de 1951.

En 1954, Lacan buscaba contraponer la dialéctica simbólica al aplastamiento sobre el imaginario. En ese sentido, el articulo de Margaret Little (que atribuía a Annie Reich) "atestigua que la interpretación fundada en la significación intencional del acto del discurso en el momento presente de la sesión está sometida a las numerosas contingencias que el eventual compromiso del ego del analista implica" (8) En ese sentido, para Lacan lo grave no era tanto que el analista se guiara por sus sentimientos, puesto que "nunca dijimos que el analista jamás debe experimentar sentimientos frente a su paciente", sino que "el analista creyó su obligación buscar primero en el hic et nunc la razón de la actitud del paciente" (9). Es decir, el analista se cree autorizado a hacer una interpretación de ego a ego, "una interpretación cuyo fundamento y mecanismos en nada pueden distinguirse de la proyección" (10). En suma, cae en una relación dual, y lo que falta, por lo menos, es un tercer término (11)

La pregunta que cabe hacerse es porqué Lacan viene a retomar, ahora, este artículo, y más en general, el debate sobre la contratransferencia. Sobre todo cuando ese tema parecía agotado, a punto tal que, por ejemplo, en las sesiones previas, cuando aborda el caso de la joven homosexual femenina, a diferencia de otras ocasiones, su análisis de la posición e intervención de Freud ya no se reduce a la generalidad de la "contratransferencia", dando lugar, en cambio, a sus desarrollos sobre el acting-out y el pasaje al acto (ver notas y comentarios). ¿Porqué volver, entonces, sobre el tema de la contratransferencia, ahora, en esta sesión?

En realidad, el problema de la contratransferencia vuelve a tener importancia desde el seminario VIII "la transferencia", en la medida en que la "disparidad subjetiva" marca el punto final de toda idea de intersubjetvidad, y por lo tanto, de toda posibilidad de ubicar al analista como otro sujeto (12), diferenciando el nivel de lo simbólico respecto de lo imaginario (lo que a su vez permitía, en cierto sentido, desplazar, facilmente, todo lo criticable de la contratransferencia, hacia el eje de lo imaginario). Entonces, descartada la intersubjetividad, si el analista no es un sujeto, ¿qué es?
¿Podríamos encontrar alguna orientación o respuesta en las discusiones sobre la contratransferencia?

Es lo que parece plantearse en el seminario VIII "la transferencia", en particular, en la discusión con Money-Kyrle (13), de quien Lacan dice "doy crédito al autor, y a toda la escuela que representa, de marcar (viser) algo que tiene efectivamente lugar en la topología. Pero hay que articularlo, situarlo, de una buena vez, y explicarlo de otro modo" (14)
La particularidad que podríamos señalar en el abordaje que hace de la contratransferencia Money-Kyrle ("y la escuela que representa", para el caso, la inglesa), en contraposición a la escuela norteamericana, es ubicar ese asunto en el eje, ya propuesto por Freud, de la comunicación de inconsciente a inconsciente (ver
aquí para más detalles). Lo que Lacan apreciará, en cierto sentido, en este planteo, es la idea que el analista no opera desde un punto en el que tendría el control de sus respuestas y sus emociones (a diferencia de los planteos que rechazan la contratransferencia con la pretensión de fundar la neutralidad analítica en la parte "sana" o "sin conflicto" del yo, y el criterio de realidad del lado del analista). Pero le criticará a Money-Kyrle el aplastamiento que hace sobre el eje imaginario de esa "comunicación de inconsciente a inconsciente", y buscará reconducir ese "inconsciente" a la topología que le permite precisar "el lugar de a, el objeto parcial, el agalma, en la relación de deseo, en tanto ella misma está determinada en el interior de una relación más amplia, la de la exigencia de amor. Solo dentro de esta topología podemos comprender una forma de proceder semejante" (15) (ver aquí para más detalles)

En suma, si del lado del analista ya no hay otro "sujeto" (como lo suponía la intersubjetividad), lo que si hay es otro "deseo" (el deseo del analista), cuyo estatuto es lo que se impone precisar.

¿Que nos aporta ahora Margaret Little que tenga pertinencia para los nuevos desarrollos que conllevan la invención del objeto a? ¿Qué hay en los artículos de Margaret Little que le dan relieve a los casos clínicos que en ellos presenta? ¿Será el debate con Margaret Little, de la misma naturaleza que el que sostuvo con Money-Kyrle? ¿O habrá otros elementos en juego que se expresarán en la necesidad de proseguir ese debate con los casos de Lucia Tower?

2 - Margaret Little

Comencemos con los artículos de Margaret Little. El desarrollo de Lacan girará en torno a dos casos que se articulan en función de sendos duelos (incluido el de la propia Margaret Little) y lo que ella llama "la respuesta total del analista". Para Lacan, es desde "lo que ella concibe como la respuesta del analista" que "llega a tomar posiciones completamente contrarias - lo cual no significa que sean falsas - a las formulaciones clásicas. Lejos de permanecer fuera del juego, es preciso que el analista se suponga, al principio, metido en él hasta el cuello, se considere efectivamente responsable (...) Situar en el interior de esta perspectiva la función del analista es de una originalidad que se presta a problemas" (16), y parece que estos son los problemas que le interesan a Lacan.

Por eso creo que tiene pertinencia ordenar el recorrido de esta analista, desde los dos artículos señalados (el de 1951 y el de 1957) hasta sus posteriores referencias a su análisis con D.W.Winnicott.

La vida y obra de Margaret Little estuvo marcada por sus análisis con Ella Freeman Sharpe y Donald W. Winnicott (17). La primera se negó a reconocerle que tenía una enfermedad cardíaca, y murió un mes después de anunciarle la fecha en que daría por terminado su análisis, en tanto el segundo no dudó en reconocer su dolencia.

Como bien analiza Gloria Leff en "Juntos en la chimenea" (18), los textos señalados de 1951 y 1957 van conformando un recorrido cuyo punto culminante es "On Basic Unity" (19). El planteo de Margaret Little es que hay ciertos pacientes que desarrollan una transferencia delirante que consiste en la creencia absoluta de una identidad entre el analista y el paciente. Se llega a esta instancia vía la regresión a "angustias anteriores a las de las psiconeurosis" (20), angustias "impensables" o "arcaicas", que derivan de traumas "contra los cuales un individuo no tiene una defensa organizada, por lo que sobreviene un estado de confusión", que se experimenta como una aniquilación total, como una caída interminable, como una falta de medios para comunicarse, quedando totalmente aislado, como un permanecer desconectado del propio cuerpo, o como estar perdido en el espacio (21). Margaret Little retoma la idea de Winnicott de la psicosis como una "enfermedad de deficiencia ambiental", de modo que su terapéutica requiere la regresión "a la época en la que la adecuación o la deficiencia del medio era esencial. El analizado revive y reconstituye sucesos de esa época y el analista provee dicho ambiente" (22). "La regresión a la dependencia es un 'proceso curativo' que no se origina en el analista sino en esa parte del analizado, su "verdadero self", que aún puede tener esperanzas de revertir la falla original al hallar en el analista la adaptación necesaria para sus necesidades. Más que 'técnica', se requiere 'tratamiento'; y en lugar de interpretación verbal, un comportamiento y manejo intuitivos" (23)
Aplicado esto a su propio análisis con Winnicott, Margaret Little señala que "para mí, D.W. no representaba mi madre. En mi delirio transferencia, el era mi madre, y como en realidad existe una continuidad entre la madre y el feto, desde los puntos de vista genético y físico (a través de la placenta y de las membranas), para mí las manos de D.W. eran el cordón umbilical, su diván la placenta, y la manta las membranas" (
24) (todas las negritas son de la propia M. Little)

Se comprende mejor, ahora, el alcance de la "respuesta total" requerida al analista ya en 1957. Esa "respuesta total" nombra un compromiso y un implicación del analista que serían necesarios para el éxito del análisis, que serían requeridos por la propia lógica del análisis, y que, en ese sentido, deberían diferenciarse de las situaciones que las contraindicaciones consabidas respecto de la contratransferencia suelen reseñar.

3 - La función de corte

Importa entonces precisar mejor esa diferencia entre la "respuesta total" requerida por parte del analista y los desvíos de la contratransferencia como por ejemplo, la mera "confesión", de parte del analista, de sus sentimientos, vía introducida en su momento por Ferenczi y objeto "de las más extremas reservas entre los analistas clásicos" (25)

La primer crítica de Lacan a M. Little es que "no se trata de una clase de sujetos [los que desarrollarían la transferencia delirante] sino de una zona donde prevalece lo que yo defino aquí como acting-out" (26).

El caso de cleptomanía permite ilustrar con precisión el debate y las diferencias entre M. Little y Lacan
Recordemos que se trata de un caso donde ninguna de las interpretaciones que elabora la analista, "por sutiles y variadas que sean, rozan ni por un instante la defensa del sujeto" (
27). Hasta que, un día, la paciente llega conmovida por la muerte de una amiga de sus padres, a la que no veía desde hace mucho tiempo. Lo novedoso de la situación es que la paciente "nunca había hecho un duelo semejante por nadie" (28)
La analista responde como siempre, con sus interpretaciones. Pero nada funciona hasta que "alguna cosita empieza a desencadenarse cuando la analista le confiesa al sujeto que ya no entiende nada y que verla así le da pena. Y entonces nuestra analista deduce que es lo positivo, lo real, lo vivo de un sentimiento, lo que ha devuelto al análisis su movimiento" (
29)

Para M. Little, lo vivo del sentimiento de la analista es esta implicación ("sentía pena, con ella y por ella"), y esto es lo que configura la "respuesta total", el elemento clave. En cambio para Lacan, "lo que afecta al sujeto", lo que se pone de manifiesto para la paciente, es que "habia una persona para quien ella podía ser una falta. La intervención le habia hecho percibir a la paciente que había en la analista lo que se llama angustia. Aquí nos encontramos en el límite de algo que designa en el análisis el lugar de la falta. Esta inserción, este injerto, esta acodadura, abre una dimensión que permite a este sujeto femenino captarse como una falta, mientras que no podía hacerlo en absoluto en toda su relación con los padres" (30). Si la interpretación da en el blanco no es como sentimiento positivo sino porque "introduce por una vía involuntaria lo que está en juego, y debe estar siempre en el análisis (...) la función del corte" (31)

El análisis del duelo y los dos momentos que M. Little señala como virajes o progresos en el análisis, pondrán de manifiesto que la paciente "nunca había podido hacer el menor esbozo de sentimiento de duelo por un padre a quien admiraba (...) no podía representar de ningún modo algo que hubiera podido, desde el punto de vista que fuese, faltarle al padre". Tampoco la madre "pudo hacer de esta hija nada más que una prolongación de ella misma, un mueble, incluso un instrumento, a veces instrumento de amenaza y de chantaje, pero, en ningún caso, algo que hubiera podido tener una relación causal respecto a su propio deseo" (32)

La "función del corte" es la "corrección" que Lacan aporta a los "problemas" a los que se presta la "originalidad" de M. Little al situar "la función del analista" en la perspectiva de lo que ella llama "respuesta total"

4 - Deseo del analista y objeto a

El corte es, para Lacan, "sin duda el modo más eficaz de la intervención y de la interpretación analítica. Y es por lo que es una de las cosas sobre las que más deberíamos insistir". Esto lo plantea ya en la sesión del 1 de julio de 1959 del seminario sobre el deseo y su interpretación, donde lo asocia al "deseo del analista". En efecto, el "deseo del sujeto, en tanto que deseo de deseo, abre sobre el corte, sobre el ser puro, aquí manifestado bajo su forma de falta (manque). Este deseo del deseo del Otro ¿a qué deseo, al fin de cuentas, va a afrontarse en el análisis, si no es al deseo del analista?" (33) (subrayado mío).

También encontraremos esta referencia al "deseo del analista" en las diferentes discusiones respecto a la contratransferencia. Es el caso en la sesión del 8 de marzo de 1961, del seminario sobre la transferencia, cuando comenta el trabajo de Money-Kyrle: "ahí es donde se plantea la cuestión del deseo del analista y, hasta cierto punto, la de su responsabilidad" (34)

Y también será esa la referencia en este seminario sobre la angustia. En efecto, en la sesión siguiente, del 27 de febrero 1963, señala que lo que deseaba aportar con la referencia a los articulos presentados sobre la contratransferencia es que "este discurso sobre la angustia no puede mantenerse alejado por más tiempo de un abordaje más preciso de algo que aparece en mi discurso de un modo cada vez más insistente, desde hace algún tiempo, a saber, el problema del deseo del analista" (35)

Ahora bien, la pregunta por el deseo del analista incubó, desde su comienzo, el problema del objeto.

En la sesión mencionado del 1 de julio de 1959, ya señalaba que "en ese corte hay algo, esa misma cosa que hemos aprendido a reconocer bajo la forma de ese objeto fálico latente a toda relación de demanda, como significante del deseo" (36) (subrayado mío). Lo que Lacan llamará, parafraseando las "contrepèteries" de Désiré Viardot, "un grano de fantasía" (37).

En el seminario 8, sobre la transferencia, bajo la forma del agalma. Como vimos, Lacan aborda los desarrollos sobre la contratransferencia en los siguientes términos: "aún en la medida en que hubiera alguna legitimidad en este modo de proceder, de todas formas son nuestras categorías las que nos permiten comprenderlo. En mi opinión no es posible comprenderlo fuera del registro de lo que he señalado como el lugar de a, el objeto parcial, el agalma, en la relación de deseo" (38)

En esta sesión del 30 de enero de 1063, abordará el problema por la vía del objeto en el duelo y en la cleptomanía.
Con respecto al duelo, tomando el caso del articulo de M. Little de 1951, señala que "solo estamos de duelo por alguien de quien podemos decir 'yo era su falta' " (
39) ¿Y cómo se articulan el duelo, la falta y el amor? "Lo que damos en el amor es esencialmente lo que no tenemos, y cuando lo que no tenemos nos vuelve, hay, sin duda, regresión, y al mismo tiempo revelación de aquello en lo que faltamos a la persona para representar dicha falta" (40)

Respecto del objeto en juego en la cleptomanía (caso del articulo de M. Little de 1957), Lacan pone las siguientes palabras en boca del cleptómano: "Les muestro un objeto que he quitado por la fuerza o mediante astucias, porque en algún lugar hay otro objeto, el mío, el a, que merecería ser considerado, que lo dejen por un instante aislarse" (41)

La "función del corte", en suma, "trata del límite donde se instaura el lugar de la falta" (42). Debemos articular el objeto a con la falta y el deseo. Es el planteo que Lacan deja abierto para su regreso de las vacaciones, con el tema de los finales de análisis, encargando la lectura y comentario de dos artículos, uno de Thomas Szasz, "On the Theory of Psychoanalytic Treatment" (43), y otro de Bárbara Low, "The Psychological Compensations of the Analyst" (44) (ver notas y comentarios)

Notas

(1) Little, M. (1957). 'R'—the Analyst's Total Response to his Patient's Needs. Int. J. Psycho-Anal., 38:240-254. Disponible aquí en castellano y en francés

(2) Jacques Lacan, El Seminario, Libro X, La angustia, Editorial Paidos, página 150

(3) Idem pagina 154

(4) Margaret Little, "Countertransference and the patient's response to it", International Journal of Psycho-Analysis, 32: 32-40, 1951 (ver aquí)

(5) Jacques Lacan, El seminario, Libro 1, Los escritos técnicos de Freud, Editorial Paidos, páginas 54 a 59.
Agreguemos, de paso, que la fecha que figura al final de esa sesión, en la edición Paidos de ese seminario, en la página 65, está equivocada. Ahí figura 7 de enero de 1954 cuando se trata del 27 de enero de 194

(6) Annie Reich, Sobre la contratransferencia, On Countertransference, International Journal of Psycho-Análysis, 32:25-31, 1951 (ver aquí)

(7) Jacques Lacan, El seminario, Libro 1, Los escritos técnicos de Freud, Editorial Paidos, página 56

(8) Idem, página 57

(9) Idem

(10) Idem, página 58

(11) Idem página 59

(12) Como por ejemplo, en el modelo del juego del bridge, tal como se plantea en "Dirección de la cura y los principios de su poder", Escritos 2, página 569

(13) Money-Kyrle: "Normal counter-transference and some deviations", publicado en el volumen XXXVII, de julio-octubre de 1956, páginas 360/6, del International Journal of Psychoanalysis (un número que reúne varios de los trabajos presentados en el 19 Congreso Psicoanalítico Internacional, reunido en Génova, entre el 24 y 28 de julio del año anterior, bajo el título de "Discussion of Problems of Transference". El trabajo de Money-Kyrle también había sido presentado en dicho Congreso). Ver aquí

(14) Jacques Lacan, El Seminario, Libro VIII, La transferencia, Ed. Paidos, Buenos Aires 2003 (traducción de Enric Berenguer), página 224
Jacques Lacan, Le Séminaire, Tome VIII, Le transfert, Edition Seuil, mars 1991, página 231 (sesión del 8 de marzo de 1961) : "Je fais le crédit a l'auteur, et a toute l'école qu'il représente, de viser queque chose qui a effectivement place dans la topologie. Mais il faut l'articuler, le situer une bonne fois, et l'expliquer autrement"
"Hago crédito al autor, y a toda la escuela que representa, de marcar (viser) algo que tiene efectivamente lugar en la topología. Pero hay que articularlo, situarlo, de una buena vez, y explicarlo de otro modo" (traducción mía)

(15) Idem, página 222

(16) Jacques Lacan, El seminario, Libro X, La angustia, Editorial Paidos, página 156

(17) Margaret Little, Relato de mi análisis con Winnicott, Lugar Editorial, Buenos Aires 1995. Título original: "Psychotic Anxieties and Containment. A personal record of an analyse with Winnicott".

(18) Gloria Leff, "Juntos en la chimenea. La contratransferencia, las "mujeres analistas" y Lacan", Epeele, México, 2007 (ver presentacion)

(19) Margaret Little, "On Basic Unity", IJP, Vol XLI, partes 4-5, páginas 377-383, Londres, 1960.

(20) Margaret Little, Relato de mi análisis con Winnicott, página 83

(21) Idem, página 84
Allí Margaret Little hace referencia a dos textos de Winnicott, "
Variedades clínicas de la transferencia" (en "Escritos de Pediatría y Psicoanálisis", páginas 405-412, Editorial Laia, Barcelona, 1979) y "Los designios del tratamiento psicoanalítico" (en "El proceso de maduración en el niño", páginas 201-206, Editorial Laia, Barcelona, 1975)

(22) idem

(23) Idem, páginas 83/4
Allí Margaret Little hace referencia a otros tres textos de Winnicott, "Aspectos metapsicológicos y clínicos de la regresión dentro del marco psicoanalítico" (en "Escritos de pediatría y psicoanálisis", páginas 377-398, Editorial Laia, Barcelona, 1979), "La mente y su relación con el psiquesoma" (en "Escritos de pediatría y psicoanálisis", páginas 331-346, Editorial Laia, Barcelona, 1979) y "Deformación del ego en términos de un ser verdadero y falso" (en "El proceso de maduración en el niño", páginas 169-184, Editorial Laia, Barcelona, 1975)

(24) Idem, página 91

(25) Jacques Lacan, El seminario, Libro X, La angustia, Editorial Paidos, página 156

(26) Idem

(27) Idem, página 157

(28) Idem

(29) Idem
El
texto de M. Little es el siguiente: "De una manera u otra era necesario poner termino a esta situación. Finalmente la dije lo doloroso que era su desamparo, no solo para ella y su familia sino también para mi misma. Le dije que pensaba que nadie que la viera en ese estado podría dejar de sentirse profundamente afectado, que yo sentía pena, con ella y por ella, en la perdida que ella había soportado. El efecto fue instantáneo y masivo" (subrayado mío).

(30) Idem

(31) Idem, página 158

(32) Idem, página 159

(33) Jacques Lacan, El seminario, libro VI, El deseo y su interpretación, sesión del 1 de julio 1959. Disponible la estenotipia en francés, aquí (formato PDF), aquí (formato htm). Ver traducción al castellano de la última parte

(34) Jacques Lacan, El Seminario, Libro VIII, La transferencia, Ed. Paidos, Buenos Aires 2003 (traducción de Enric Berenguer), página 224

(35) Jacques Lacan, El seminario, Libro X, La angustia, Editorial Paidos, página 162

(36) Jacques Lacan, El seminario, Libro VI, El deseo y su interpretación, sesión del 1 de julio 1959, inédito

(37) Michel Sauval, "Un grano de fantasía", Revista "Relatos de la Clínica" nº 1 (noviembre 2000)

(38) Jacques Lacan, El Seminario, Libro VIII, La transferencia, Ed. Paidos, Buenos Aires 2003 (traducción de Enric Berenguer), página 222

(39) Jacques Lacan, El seminario, Libro X, La angustia, Editorial Paidos, página 155

(40) Idem

(41) Idem, página 159

(42) Idem

(43) Thomas Szasz, "On the Theory of Psychoanalytic Treatment", ("De la théorie du traitement psychanalytique"), International Journal of Psycho-Analysis, vol. 38, 1957, pp. 166-182. Existe traducción al castellano: "Sobre la teoría del tratamiento psicoanalítico", en Bibliográfica nº 7, "Referencias de Lacan, Seminario X La angustia", Publicación de la Biblioteca del Campo Freudiano de Barcelona y de la Escuela Lacaniana de Psicoanálisis del Campo Freudiano, Comunitat de Catalunya

(44) Barbara Low, "The Psychological Compensations of the Analyst", International Journal of Psycho-Analysis, vol XVI, 1935, pp. 1-8. Publicado en alemán en Int. Zeitschrift, 1920. Existe traducción al castellano: “Las compensaciones psicológicas del analista, Ficha Nº 5 EFBA, serie Referencias, Traducción de Sheila Relliham. También fue publicado en Bibliográfica nº 7, "Referencias de Lacan, Seminario X, La angustia", Publicación de la Biblioteca del Campo Freudiano de Barcelona y de la Escuela Lacaniana de Psicoanálisis del Campo Freudiano, Comunitat de Catalunya

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